La princesa Letizia apuesta por la sencillez y la sobriedad durante la visita del Papa en las JMJ

Ana Van den Eynde
Las celebraciones de la Jornada Mundial de la Juventud concluyeron ayer en Madrid, con la misa del Papa en el aeródromo de Cuatro Vientos. A este acto acudió la Familia Real, que se ha reunido con el Pontífice en tres ocasiones, dejando unos estilismos marcados por la sobriedad.

Príncipes de Asturias

La princesa Letizia, uno de los iconos de la moda española por su posición, apostó para la visita de Benedicto XVI a la Zarzuela por un conjunto de falda y chaqueta. Podría considerarse una opción arriesgada, ya que la princesa, en un encuentro anterior con el Pontífice y al lucir un estilo similar, fue califica como demasiado atrevida porque la largura de la falda era "demasiado corta".

El color elegido por la princesa ha sido el beige, con este conjunto en tela tweed que ha conjuntado con sandalias de tiras en el mismo beige y en marrón, y ha completado el conjunto con una camisa de un tono ligeramente más claro. Las infantas Leonor y Sofía lucieron un 'look' muy veraniego con vestidos de flores en color verde y rosa. También el príncipe Felipe de Borbón eligió el verde claro para su corbata, junto a un traje azul marino.

Ayer en Cuatro Vientos, sin embargo, eligió un conjunto de pantalón y blusa debido a que el tiempo amenazaba lluvia, como finalmente se cumplió. Pantalón negro de talle alto, blusa de seda blanca de manga corta y cinturón gris con hebilla plateada, un modelo monocromático que de nuevo dejaba una imagen de sobriedad propia de la princesa en sus encuentros con el Papa.

La reina Sofía con benedicto XVI y el Rey Juan Carlos

La reina, imagen de elegancia


El rey Juan Carlos y doña Sofía se han encontrado en tres ocasiones con Benedicto XVI durante la celebración de las JMJ, lo que ha dejado tres 'looks' diferentes de la reina Sofía, que en todas las ocasiones ha apostado por la combinación de falda y chaqueta, aunque con notables diferencias en color, tela y largura.

Para recibir al Papa, la reina Sofía eligió un traje en color blanco azulado, de marga larga y con grandes botones, acompañado de un bolso en color crema. Para la visita de la Zarzuela, la reina apostó por un conjunto muy original en color mostaza, uno de los colores del Vaticano. La falda, por debajo de la rodilla y con estampado a juego con los remates de la chaqueta, de color liso.

Por último, en la despedida del Pontífice en el aeródromo, la reina lució un conjunto muy primaveral, de corte similar a los anteriores, de fondo blanco y con un estampado muy alegre en tonos pastel de estilo floral aunque con formas abstractas. La familia real ha apostado por sus mejores galas para celebrar la Jornadas Mundiales de la Juventud.

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