Rihanna vuelve a poner de moda los dientes de oro, un riesgo para la salud

Hace tiempo que el oro no se usa en los tratamientos de odontología. Antes llevar algún diente de oro otorgaba dignidad, respeto y admiración hacia la persona que lo tenía. Los dentistas lo utilizaban porque se trataba de un material noble, que no producía alergias y que se podía moldear fácilmente. Y las personas se ponían los dientes de oro porque les confería un status alto. Sin embargo hace ya un tiempo que el oro fue sustituido por materiales más transparentes y menos llamativos, y ante la visión de un diente de oro ya no pensamos que sea estéticamente atractivo.

Rihanna y los dientes de oro

Pero puede que esta percepción antiestética del diente de oro, cambie radicalmente si, como ocurre con muchas otras cosas, decidimos seguirle los pasos a una celebrity como Rihanna. Y es que la cantante ha aparecido últimamente luciendo su sonrisa más brillante con un diente de oro, emulando a algunos de los cantantes de rap más afamados.

Las críticas no se han hecho esperar aludiendo a la falta total de criterio estético por apuntarse a esa tendencia con aires macarras. Sin embargo, sospechamos que sólo es cuestión de tiempo que numerosas seguidoras se apunten a la moda de los dientes de oro.

Por si ya te lo estás pensando, te advertimos de los peligros que supone una corona dental de oro. Caries, rotura de dientes y alergias son riesgos que se pueden considerar mínimos ante el peligro de padecer una grave enfermedad gingival, que provoca úlceras y hemorragias y puede ocasionar la pérdida de alguna pieza dental.

Adornos dentales

Efectivamente, se trata de poner en peligro nuestra salud bucodental para seguir una moda que arranca del capricho de una famosa. Además, los dientes dorados siguen estando mal vistos y relacionados con un mundo marginal.

Pero tienes otras opciones para decorar tu sonrisa que suponen menos riesgo para tu salud y son más aceptadas estéticamente. Se trata de la joyería dental. Consiste en adherir al diente una pequeña joya, como puede ser un diamante o una esmeralda de una forma sencilla, segura, rápida y sin dolor.

En el mercado se pueden adquirir kits completos para colocarte la joya dental tú misma, pero es preferible acudir a un profesional para eliminar cualquier riesgo. El dentista limpiará la superficie del diente sobre el que se va a colocar la joya y la pegará con un pegamento especial. Se trata por lo tanto de un procedimiento muy sencillo que no requiere anestesia y sólo le llevará unos minutos. Existe un leve riesgo de que se formen bacterias alrededor de la joya, pero el dentista te informará de las medidas de higiene que debes tomar.

Lo mejor de este adorno dental es que puede durar varios años, pero si en algún momento decides que ya no te gusta, podrás quitarlo tan rápidamente como te colocaste. En cualquier caso, si quieres decorar tu sonrisa elige un método que no implique ningún riesgo para tu salud bucodental, y no olvides que la mejor sonrisa es una sonrisa sana.

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