Recomendaciones para una escapada a la nieve

Laura Sánchez, Filóloga

Pasar un fin de semana invernal en alguna de las estaciones de esquí que tenemos en nuestro país es una de las actividades de ocio más interesantes. Se trata de una forma diferente de hacer turismo a la vez que practicamos deporte y nos olvidamos del estrés cotidiano. Porque la nieve relaja y mejora el ánimo, pero si no eres asidua de las pistas de esquí, tal vez no sepas lo que te hace falta para disfrutar de una escapada a la nieve.

Equipada contra el frío

Si vas a pasar unos días en la nieve, lo primero que necesitarás será ropa de abrigo para hacer frente a las bajas temperaturas. Pero no sirve cualquier ropa de abrigo, así que te puedes ir olvidando de tu polar y de tu plumas, porque no los vas a necesitar. Lo mejor es que te dejes asesorar en una tienda de deporte sobre el equipo que necesitas y no te preocupes por hacer una buena inversión, porque puedes estar segura de que la experiencia en la nieve te encantará y repetirás el viaje.

Elige una ropa interior adaptada a las condiciones de tu escapada, que sea fina pero que mantenga el calor y no retenga la transpiración o la humedad. El algodón no tiene cabida en estas prendas, ahora los fabricantes trabajan con tejidos especiales que te protegen del frío. Lo mismo ocurre con las camisetas térmicas, que también tendrás que llevar. Y la chaqueta es mejor que sea específica para la práctica del esquí.

Acuérdate de llevar también un buen gorro y un pañuelo para el cuello, y presta especial atención a la elección de los guantes, porque es una de las prendas más importantes. Asegúrate de que tienen un buen tejido aislante para impedir que el frío y la humedad lleguen a tus dedos.

La protección que necesitas en la nieve

Aunque estés en invierno, la protección solar es tan importante como si estuvieras en la playa. El sol junto con las bajas temperaturas es un peligroso enemigo de tu piel y de tus ojos, así que utiliza un protector solar alto y protege también tus labios. Las gafas de sol son imprescindibles si no quieres tener problemas de visión.

No te preocupes por el resto del equipo, como las tablas, las botas o los esquís, porque en todas las estaciones tienen un servicio de alquiler. Y una buena idea es, que si no has esquiado antes, te apuntes a un cursillo de iniciación para que puedas disfrutar al máximo de la experiencia.

Y si no quieres que tu escapada a la nieve se convierta en inolvidable por lo desastrosa que ha sido, sigue en todo momento las indicaciones de los monitores y de compañeros más experimentados. Es fundamental que ayudes a mantener la seguridad en las pistas, así que es mejor que vayas acompañada en todo momento.

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