Un nuevo contrato para el amor

Saúl C. Montaño Quintanilla
Lo mejor es empezar comparando épocas. No hace mucho tiempo, el viejo contrato matrimonial solo nos daba la posibilidad de decidir la forma de compartir, y dividir, los bienes de los amantes abajo firmantes. El matrimonio era esencialmente una relación monogámica para vivir bajo un mismo techo. Y tú, querida amiga, estaba condenada a ser la reina del hogar bajo el manto protector de un hombre mandón y quejica. Y se acabaron las opciones. Este contrato fue la base de las relaciones amorosas de la humanidad durante muchos años.

Por suerte, hoy, la vida es muy distinta. Las mujeres son dueñas de su casa, vida, decisiones, cuentas, tiempo, trabajo, ocio y amigos. La relación amorosa, cuando acontece, es un acontecimiento más, para ser bien disfrutado entre muchos otros acontecimientos. Puede que sea lo más importante en nuestra vida, pero no será lo único.

Contrato amor
Muchas parejas negocian un nuevo contrato de amor para tener una relación estable. Por ejemplo, hay matrimonios que deciden vivir en casas separadas, tener espacios de intimidad, para preservar el amor de la rutina y de los pequeños conflictos del cotidiano.

La idea que al final está triunfando es que leyes y firmas en contratos rígidos, con el ideario caduco de o eso o nada, no enturbien una evolución constante de la relación en pareja. ¿Por qué abdicar del amor si no podéis vivir en la misma casa? Los deseos profundos de la pareja deben ser las normas reales de convivencia. El nuevo contrato amoroso es comunicar, respetar, reinventarse.

Nuevo contrato de amor


Para firmar este nuevo contrato del amor lo importante es que no te calles, no te conformes. Deje bien explícito cuáles son tus sentimientos y deseos para mantener tu relación activa. Por eso, en los nuevos contratos amorosos, se discute la fidelidad, el compañerismo y todos los contornos posibles de una relación sentimental.

La comunicación abierta entre la pareja es lo que crea una complicidad amorosa y el camino para innovar en el amor. Los nuevos contratos amorosos evolucionan porque lo que antes te apetecía, puede que hoy te aburra.

Ya somos mayorcitas para comprender que un único hombre no realizará todos nuestros sueños y fantasías hasta que la muerte nos separe bajo el mismo techo y sobre la misma cama.

Ana Rosa

Puedes leer más artículos similares a Un nuevo contrato para el amor, en la categoría de Pareja en Diario Femenino.

Publicado:
Actualizado: