Cómo broncear tu piel este verano sin riesgos

Si eres de las personas a las que les gusta sentirse ideal durante el verano, seguro que sabes que tener un buen bronceado te ayuda a ello. Pero si desconoces cómo conseguirlo, a continuación, vas a descubrir algunas pautas para lograrlo sin ningún tipo de esfuerzo.

El primer paso

Ponerse morena no solamente es sentarse al sol y esperar a que los rayos del Astro Rey hagan su trabajo. Además, esto puede resultar muy peligroso para tu piel. Por eso, lo mejor que puedes hacer es prepararla. Para ello, un mes antes, siempre que sea posible, tienes que comenzar a hidratarla. Si no tienes la oportunidad, puedes hacerlo una semana antes. Para ello, toma como costumbre aplicarte una crema humectante a diario y no te olvides de beber unos 2 litros de agua también al día.

Prepara tu piel desde dentro

Realizarte exfoliaciones de manera periódica, y especialmente unos quince días como mínimo antes de empezar a tomar el sol, te va a ayudar a que el bronceado que consigas durante tus días de descanso te dure más tiempo. El motivo es que vas a eliminar toda la piel muerta que tengas y no broncearás una piel que acabarás perdiendo al poco tiempo. Además, los poros se van a cerrar y así también vas a evitar las quemaduras.

Cuando te tumbes al sol

Ha llegado el día en el que te vas a exponer al sol por primera vez en todo el año. Pero recuerda que lo debes hacer poco a poco. Durante el primer día solamente con unos cinco minutos será suficiente y después ve aumentando el tiempo de exposición de manera paulatina. Y es que cuanto más tiempo estés expuesta al sol, más probabilidades vas a tener de quemarte. En el momento en que la melanina se haya activado y comience a desprender los melanocitos, se acelerará el proceso de bronceado. ¡Tranquila!

En los primeros días, usa protectores con factor de protección elevado. Es la única manera de conseguir un bronceado duradero, mucho más bonito y encima, sin perjudicar a tu piel. Si lo deseas, puedes usar también productos que te ayuden a activar la melanina.

No olvides jamás usar un protector solar adecuado para el tipo de piel que tengas. Esto te va a ayudar a que no aparezcan manchas. Aplícalo cada dos horas aproximadamente. Otro truco que puede contribuir a lograr el moreno que siempre has deseado es recurrir al conocido "efecto lupa". El mismo hace que la piel mojada recoja mejor los rayos del sol, además de mantenerla más fresca y hacer que aguante el calor mejor. Así que no dudes en bañarte o mojarte de forma continuada para broncearte más rápidamente. Eso sí, siempre con las cremas correspondientes.

¿Y si no puedo tomar el sol?

Si no tienes la oportunidad de escaparte un rato a la piscina o a la playa y no quieres renunciar a lucir una piel bronceada, bonita e hidratada, puedes recurrir a autobronceadores. Son cremas que con las que no necesitarás una exposición (prolongada) en el sol y que harán que logres el tono de piel deseado con todas las garantías. Haz uso de ellos adecuadamente extendiéndolos con suavidad por toda la piel con masajes suaves. Después, lávate muy bien las manos y usa ropa amplia y ligera durante las primeras horas para que el producto realice su trabajo con eficacia. Vas a poder encontrar una amplia gama de autobronceadores por ejemplo en las tiendas físicas y online de Douglas, donde además encontrarás otros productos para el cuidado de la piel antes y después de la exposición al sol.

Al acabar, cuida tu piel

No olvides que después de una jornada de sol tu piel va a necesitar una recuperación. Para ello date una ducha o un baño para eliminar cualquier resto de crema, de sal o de cloro. A continuación, hidrátate muy bien por fuera aplicando un aftersun que cuente con ingredientes activos para regenerar tu piel.

Desde dentro también es importante

No solamente el cuidado externo va a hacer que puedas broncear la piel de una manera segura y saludable. Para tener una correcta hidratación de esta, lo más adecuado es consumir alimentos y líquidos que te proporcionen la cantidad de agua necesaria. Opta por elaboraciones que sean ricas en distintas vitaminas para que la melanina logre activarse de una manera natural. Lo puedes lograr mediante productos ricos en Q10, como la famosa zanahoria. Las nueces y las espinacas te van a ayudar igualmente a regular tu moreno. El consumo de frutos rojos y cítricos contribuyen así mismo a que tu piel pueda gozar de un bronceado más sano y duradero.

En cualquier caso, ten en cuenta que conseguir un bronceado duradero, rápido y bonito no es un proceso rápido. Considerando que cada cuerpo necesita un determinado tiempo para lucir el moreno deseado dependiendo de la melanina de cada persona, lo mejor es que lo hagas con seguridad y que no pongas en riesgo la salud de tu piel, y con estos consejos lo vas a conseguir.

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