La mejor manera de conservar el pavo de Navidad meses en perfecto estado

Formas de almacenar el pavo relleno navideño tras las comidas o cenas

Sandra Llorente, Periodista
En este artículo
  1. Pavo navideño: cómo conservarlo en el refrigerador
  2. ¿Se puede congelar el pavo después de Navidad?

Muchas familias eligen el pavo relleno para la cena de Nochebuena y la comida de Navidad. Es un plato diferente a lo que solemos comer todo el año, muy nutritivo y delicioso. Debido a su tamaño, es muy común que sobre pavo en Navidad, por lo que normalmente lo repartimos y lo conservamos. Sin embargo, ¿sabemos hacerlo adecuadamente para que su sabor se conserve intacto y no proliferen bacterias? En Diario Femenino te contamos cuál es la mejor manera de conservar el pavo de Navidad durante meses en perfecto estado

Pavo navideño: cómo conservarlo en el refrigerador

Acabamos de terminar de comer el delicioso pavo y toda la familia quedó satisfecha. Es importante que lo refrigeres lo antes posible para evitar que se deteriore. Después de que se haya enfriado (tras servirse) el pavo debería refrigerarse en las dos horas siguientes como máximo, por lo que la sobremesa con tu familia e invitados con el pavo encima de la mesa no es la mejor opción. 

Llévate las sobras del pavo y ponlas en un recipiente acorde al tamaño que ahora tenga. Si las sobras no son muchas y te cabe en un recipiente hermético, introdúcelas mejor ahí. Si no es este el caso, entonces cúbrelo con papel plata o film. Introdúcelo en el refrigerador. Podrás consumirlo en los siguientes dos a tres días en buen estado. 

¿Se puede congelar el pavo después de Navidad?

Quizás no desees consumirlo en los siguientes días y prefieras congelarlo para disfrutarlo en otro momento. Cuando el pavo se congela adecuadamente se mantendrá jugoso y con todos los nutrientes entre dos y 6 meses. Por eso la congelación puede ser una muy buena opción para aprovechar el pavo que sobra. Podrás usarlo en sándwiches y bocadillos o como plato estrella para tus invitados.

+ Lo primero que tienes que tener en cuenta para congelar el pavo es que no se puede congelar relleno, ya que de hacerlo así el relleno tardaría más tiempo en congelar que la carne y esto aceleraría la proliferación de bacterias. Por ello, la recomendación es vaciar el pavo y congelar el relleno en un recipiente hermético. Si lo deseas consumir en varias ocasiones, guárdalo en porciones varios recipientes más pequeños. De esta manera solo descongelarás lo que vayas a consumir. 

+ Por otro lado, deberás decidir si congelar el trozo de pavo completo o partido, dependiendo de cómo lo consumirás en el futuro. Debes tener en cuenta que si lo congelas completo deberás descongelarlo y consumirlo en la misma ocasión. Además, el proceso de descongelación en el refrigerador (siempre en frío) será más lento. Bien es cierto que podrás introducir de nuevo el relleno y servirlo como pavo relleno. Si esta es tu opción, lo único que tienes que hacer es envolver muy bien el pavo sobrante en papel film, en varias capas para que quede perfectamente envuelto. Si a su vez tienes un recipiente hermético o una bolsa de congelar donde te quepa el trozo, introdúcelo ahí antes de meterlo al congelador. 

+ La opción más recurrida y práctica es congelar el pavo en pedazos. Córtalo en lonchas, de la misma manera que lo haces cuando lo sirves. Lo ideal sería conservar loncha por loncha o bien en bolsas herméticas de congelación separadas o bien en tuppers, introduciendo cada loncha envuelta en papel film o plástico. Es un proceso algo tedioso, sobre todo si ha sobrado mucho pavo, pero es la mejor manera de conservar adecuadamente todo su sabor y nutrientes. De esta forma, el pavo nunca sabrá a congelado ni se agriará una vez que lo descongeles. 

Para descongelarlo, saca los trozos que vayas a consumir e introdúcelos en el refrigerador envasados en el papel plástico o en las bolsas herméticas. Al ser mochas finas no debería tardar más de una noche en descongelarse. Después, lo puedes consumir frío a modo de fiambre (por ejemplo, para un delicioso bocadillo) o bien calentarlo ligeramente en el microondas o la plancha. Si has descongelado el relleno del pavo, caliéntalo y sírvelo en conjunto, ¡estará delicioso! 

Ahora que ya conoces la forma de conservar el pavo navideño, ¡es hora de disfrutar de su sabor durante meses!

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