Cartas de San Valentín para mi hija o hijo: textos de amor verdadero

Cada 14 de febrero el mundo se llena de amor, corazones y romanticismo. Sin embargo, San Valentín es una fecha especial para celebrar el amor en todos los sentidos, no solo el amor que puedas sentir por tu esposo o por tu novio, ¿no crees? Y, en este caso, tal vez sientas que tu verdadero amor sean tus hijos, tengan la edad que tengan.

En Diario Femenino te proponemos enviar o leer estas cartas de San Valentín para una hija o un hijo, textos cargados de cariño y de amor que seguro que te encantarán, tanto si tu hijo o hija es pequeño, es adolescente o ya es adulto. ¡No pierdas detalle de estos textos cargados de amor y cariño!

Carta de San Valentín para tu hija o hijo pequeño

Comenzamos la tanda de cartas con una muy especial para esas mamás que tienen una hija o un hijo recién nacido o pequeño. Puedes guardar esta carta para cuando tu pequeña o pequeño se haga más mayor para que entienda su verdadero significado.

Mi queridísima hija (o mi queridísimo hijo),

En este día especial, San Valentín, quería escribirte una carta para que la guardes siempre. Aunque puedas pensar que es el Día de los Enamorados, para mí es un día para celebrar todo tipo de amor, especialmente el que siento por ti, mi hijo/a querido/a.

Hoy, mientras observo cómo tus pequeñas manos dibujan corazones y tus ojos brillan con la ilusión de un mundo lleno de magia y de amor, siento la necesidad de contarte algunas cosas que la vida me ha enseñado. Y lo primero que quiero que sepas es que el amor viene en muchas formas y tamaños, no es solo un sentimiento que vayas a tener con una pareja, aunque todavía te quede un buen trecho para aprenderlo.

La vida es un carrusel de emociones y de experiencias, y algunas te harán volar muy alto y otras te enseñarán a ser fuerte. Quiero que tengas presente que en cada vuelta, en cada giro, siempre estaré aquí para ti. Cada paso que des, cada sueño que sueñes, cada risa y cada lágrima, son partes de un viaje maravilloso llamado vida.

A mi la vida me ha enseñado lo que es el amor verdadero gracias a ti. Cuando tu papá y yo supimos que venías al mundo mi corazón se llenó de un cariño y de un amor que me acompañarán durante toda mi vida, y todo eso es gracias a ti. Eres mi pequeña gran suerte, mi alegría, mi orgullo. Lo eres todo para mi.

Y cuando por fin vi tu carita y me cogiste la mano supe que nunca nos íbamos a separar. Todavía eres muy pequeño/a para entender muchas cosas, pero yo estaré siempre contigo para enseñarte, para acompañarte, para levantarte cada vez que te caigas, para reírnos, y para todo lo que necesites. Nunca olvides que tienes una madre que te quiere, te admira y siempre estará contigo, vayas donde vayas, en tu corazón.

Te amo con todo mi corazón y cada día agradezco al universo por haberte traído a mi vida. No importa cuánto crezcas, siempre serás mi pequeño/a. Mi San Valentín, mi amor verdadero.

Te quiero mucho,

Tu madre.

Bonita carta de San Valentín para una hija o un hijo adolescente

Sabemos que tener una hija o un hijo adolescente puede resultar complicado en muchas ocasiones, pues la adolescencia es esa parte de la vida en la que parece que no nos entendemos con nuestros padres. Sin embargo, San Valentín puede ser una fecha estupenda para darle a tu hijo o hija esta carta y recordarle que, pase lo que pase, siempre tendrá a su mamá.

¡Hola hija/o!

Sé que seguramente te sorprenda recibir esta carta de tu madre en un día como San Valentín, donde el mundo se llena de corazones y chocolates. Pero para mí es la excusa perfecta para recordarte cuánto te quiero, aunque a veces pienses que no te comprendo o que soy de otra época. Entiendo lo que vives, los tiempos cambian pero yo también tuve tu edad y tuve los mismo sentimientos. Así que, aunque a veces no estemos de acuerdo, nunca olvides que siempre estaré aquí para escucharte y para apoyarte.

En un día en el que el amor es protagonista quiero recordarte que siempre ames con el corazón y la cabeza. No permitas que nadie te haga sentir que no eres suficiente, porque eres increíble y maravilloso/a. El amor verdadero es el que te hace sentir libre, respetado/a y valorado/a.

Eres fuerte, inteligente, capaz de alcanzar todas esas estrellas que brillan en tus ojos cuando hablas de tus sueños. Nunca dejes que nadie te diga lo contrario y lucha por lo que quieres. Y en esos días en los que todo parezca gris, recuerda que siempre estaré aquí, para darte un abrazo, escucharte o simplemente estar. Porque no importa cuántos días de San Valentín pasen, mi amor por ti es incondicional y eterno.

En este día del amor y la amistad quiero que sepas que eres lo más importante para mí. Que cada día me siento orgullosa de ser tu madre, y que te quiero con todo mi corazón.

Con todo mi amor,

Tu mamá.

Linda carta de San Valentín para tu hija o hijo si es adulto/a

¿Tu hija o tu hijo ya es adulto? Entonces seguro que le encantará y le emocionará recibir una carta como esta de parte de su madre. Porque el amor de una madre es infinito, nunca está de más recordarle a tu pequeña o tu pequeño (si, siempre será tu pequeña o pequeño) lo mucho que le quieres.

Mi querida hija (o hijo),

San Valentín es una fecha especial en la que el amor y la amistad son protagonistas indiscutibles. Por eso hoy me he decidido a escribirte unas líneas, porque eres y siempre serás mi amor verdadero. No hay mejor momento para recordarte lo inmensamente feliz que me hace tenerte en mi vida, todo lo que te amo y todo lo que te admiro.

Pienso en la persona en la que te has convertido y no puedo evitar sentir un gran orgullo y amor por ti. Recuerdo esos días en los que te sostenía en mis brazos, en los que cada pequeño paso era todo un acontecimiento. Y ahora aquí estás, caminando firme por tu propio camino, con esa determinación y esa fuerza que te hacen ser una persona maravillosa.

Te he visto enfrentarte a cada desafío y cada altibajo con una valentía admirable. Has aprendido a navegar en este mundo con una actitud que no todo el mundo posee. Y yo, como tu madre, siempre estaré ahí para ayudarte en todo lo que necesites, para caminar contigo siempre que quieras y para navegar juntas por ese mundo que ya sabes que, a veces, no es del todo favorable.

Quiero decirte que no permitas que las preocupaciones diarias te roben los pequeños placeres. El amor, en todas sus formas, es lo que da color a nuestra existencia. Ama apasionadamente, ama sabiamente, pero sobre todo, ama de manera que te haga feliz.

Quiero que sepas que, sin importar cuánto crezcas o cuántos años pasen, siempre seré tu refugio. Estoy aquí para escucharte, para aconsejarte, para ofrecerte un abrazo silencioso cuando las palabras sobran. Eres mi hijo/a, mi orgullo, mi alegría infinita. Te amo más de lo que las palabras puedan expresar. Y en este día del amor, quiero que nunca olvides ese amor incondicional que siempre llevo en mi corazón.

Doy gracias a la vida, una y otra vez, por tenerte siempre conmigo. Porque aunque a veces estemos separados, siempre encontramos la manera de hablar cada día. Gracias por entender que el amor de una madre no tiene fin.

Te quiero siempre.

Tu mamá.

¿Qué te parecen todas estas cartas de San Valentín para un hijo o una hija?, ¿cuál de ellas enviarías a tu pequeño o pequeña? ¡Feliz Día del Amor!

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