Diferencias fundamentales entre transexual y transgénero que debes conocer

La sociedad en la que nacemos, crecemos y nos desarrollamos está en continuo cambio. Cada vez son más las diferencias que surgen entre las personas que viven en ella dotando de diversidad y pluralidad un mundo que construye e impone sus ideas y concepción dicotómicas basadas en el género. Estas nuevas experiencias diversas ponen en riesgo la normatividad opresora y abren un camino para que cada uno y una tengan libertad para ser quienes son en realidad.

Aun así, surgen muchas dudas y la confusión aumenta, lo que provoca determinadas actitudes negativas y situaciones perjudiciales para quienes no se ajustan a los mandatos e imposiciones binarias del género. Además, el desconocimiento hace que se tomen como verdades absolutas y universales todos los estigmas y prejuicios que existen en relación a la identidad y/o expresión de género. Por ello, en Diario Femenino queremos explicarte las diferencias fundamentales entre transexual y transgénero para que conozcas y te acerques más a esta realidad. Presta atención y deja que tu mente se expanda.

¿Qué es la identidad de género?

Antes de conocer las diferencias entre ambas concepciones, es necesario que comprendas qué es la identidad de género. Como indica el propio concepto, la identidad de género hace alusión al sentimiento y percepción respecto al género que tiene una persona de sí misma. Es decir, la manera en la que se identifica una persona respecto a su género. Existen muchas maneras en las que la identidad genérica puede manifestarse ya sea cisgénero (aquella cuyo género sentido se ajusta con su género impuesto), bigénero (aquellas personas que se reconoce en los dos géneros construidos) o no binario (aquellas que no se identifican con ninguno de los dos géneros impuestos), y un largo etcétera de identidades. 

La identidad transexual y transgénero son las más conocidas en esta realidad, pero muchas personas tienden a la confusión y no conocen las diferencias que existen entre ellas, provocando confusiones y situaciones perjudiciales para sus protagonistas.

Transexualidad vs. Transgénero: ¿en qué consiste cada identidad?

Ambos conceptos tienden a ser empleados como sinónimos, pero la realidad es que las connotaciones que pueden tener son muy diferentes y contradictorias en algunos casos.

+ Por una parte, la transexualidad hace referencia a las personas cuya identidad de género no se ajusta con su género impuesto al nacer. Para ello suelen someterse a tratamientos médicos e intervenciones quirúrgicas para modificar aquellas partes de su anatomía, para sentirse bien consigo mismas y eliminar aquellas incoherencias que percibe entre su interior y su exterior. Dicho de otro modo, este término se emplea para aquellas personas que se someten o requieren modificaciones o cambios anatómicos, a través de medicamentos u operaciones, para ajustarse a su identidad de género. En definitiva, es un concepto empleado por la sanidad y tiende a tener muchas connotaciones médicas.

+ Por otra parte, las personas transgénero son aquellas cuya identidad de género no se ajusta o no coincide con las construcciones sociales y los roles de género que le imponen en el momento de su nacimiento. Estas personas pueden someterse a intervenciones médicas o tratamientos, siempre que lo consideren oportuno, para encontrar el equilibrio entre su interior y exterior. Hay personas transgénero que encuentran el equilibrio en otros métodos sin necesidad de someterse a operaciones o recursos sanitarios. En definitiva, este concepto tiene connotaciones culturales y sociales en cuanto al género.

Por ejemplo, una persona que al nacer se le asigna el género masculino, en base a una genitalidad, y su sentimiento y sentido como femenino, puede definirse como transgénero. Del mismo modo que si una persona al nacer ha sido asignada con el género femenino y se identifica con el masculino.

Transexualidad y transgénero: ¿en qué se diferencian?

¿En qué se diferencia ambos conceptos? Pues, como te hemos explicado, la diferencia radica en las connotaciones y los usos que tiene cada una de las palabras. Mientras que transgénero se ajusta al ámbito social y cultural, la transexualidad se emplea, en la mayoría de casos, en el ámbito sanitario y médico. Aun así, las definiciones son muy similares y parten del mismo supuesto, muchas personas transgénero no se identifican como personas transexuales, ya que no necesitan o consideran que no requieren intervenciones médicas y tratamientos para encontrar el equilibrio en su identidad de género. 

De hecho, debes evitar hacer uso de la transexualidad como un concepto genérico para nombrar a estas personas, ya que muchas personas transgénero no se identifican de ese modo o pueden llegar a sentirse ofendidas. Te estarás preguntando el porqué de la ofensa, muy sencillo, este término puede suponer que muchas personas transgénero se sientan estigmatizadas y prejuiciadas debido a los usos anteriores que tenía la palabra.

A lo largo de la historia, la transexualidad y todo aquello que tenía que ver con ella se empleaba en los ámbitos tanto médicos como psicológicos para asignar, erróneamente, a las personas transgénero como enfermas mentales, anti-naturales, desviadas o monstruos. Además, era empleado como un argumento claro y fiable para ejercer la discriminación, violencia, abuso o acoso contra estas personas. También eran empleados otras palabras derivadas de la transexualidad como travesti o transformistas que actuaban del mismo modo.

Por ello, evita utilizar esta concepción para referirte a las personas cuya identidad de género es diferente a la normativa. Aun así hay muchas personas se consideran transexuales a sí mismas, ya que consideran que este término se ajusta a la perfección con la realidad que atraviesa sus vidas y no consideran que sea una ofensa o una etiqueta difícil de erradicar.

Otras diferencias entre ambos términos son el uso y la realidad a la que envuelven. Aun así, el concepto transexualidad se está dejando de emplear, a excepción del ámbito sanitario, ya que es considerado poco inclusivo, estigmatizante y conforma una idea errónea de la realidad trans.

Con el paso del tiempo, se ha implantado la palabra Trans para englobar a todas las realidades que se pueden dar dentro de la identidad de género y no excluir o discriminar a ninguna cuestión que no se ajuste con el concepto  transgénero. Actúa como un concepto paraguas que otorga visibilidad e inclusividad ofreciendo representación a todas y cada una de las que se identifican de una manera diferente a las construcciones sociales del género, ya sea transgénero, transexual, género fluido, agénero, bigénero o cualquier identidad.

Como has podido comprobar, no existen muchas diferencias entre estos conceptos, pero sí una explicación fundamental para que comprendas y conozcas las particularidades de ambos. Recuerda que puedes preguntar desde el respeto siempre que dudes sobre el tratamiento que debes darle a una persona trans, te responderá con educación y te explicará sus motivos si lo considera oportuno.

En Diario Femenino queremos que todas las realidades ocultas por la sociedad tengan su espacio de visibilidad, reconocimiento e inclusión, y acabar con las situaciones negativas a las que se ven expuestas de una manera impuesta y obligada. ¿Conoces más diferencias entre transexualidad y transgénero? ¡Te leemos en los comentarios!

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