Bajada de tensión; cómo actuar

Laura Sánchez, Filóloga

Seguro que más de una vez has sufrido una bajada de tensión. Sensación de mareo, zumbidos en los oídos, confusión...son algunos de los síntomas de la hipotensión, que aunque no presenta ningún riesgo para la salud, si la bajada de tensión es grande puede llegar a ser un momento angustioso. Al contrario que la hipertensión, la presión arterial baja no necesita ningún tratamiento médico, pero sí conviene saber cómo actuar en una situación como esta.

Qué es una bajada de tensión

Cuando se produce una bajada de tensión, llega menos sangre al cerebro y, por lo tanto, menos oxígeno. Esto puede ocasionar sensación de fatiga, mareos, visión borrosa, manos y pies fríos, zumbidos en los oídos, y puede llegar al desmayo. Pero como decimos, la hipotensión no supone un problema de salud, sino que se trata de una situación puntual. Es más, las personas con tendencia a una presión arterial baja tienen una esperanza de vida más alta que las personas con hipertensión.

Las bajadas de tensión afectan sobre todo a jóvenes extremadamente delgadas, a embarazadas y a personas mayores. Pero hay algunas causas que pueden favorecer la aparición de una bajada de tensión a cualquier persona, como por ejemplo, estar sometido a mucho estrés, o en ambientes muy calurosos y los cambios bruscos de posición. En cualquier caso, se trata de una dolencia pasajera, de la que no hay que preocuparse, pero en la que hay que saber cómo actuar.

Si bien no tiene consecuencias para la salud, una bajada de tensión puede producir un desmayo y, por lo tanto, una caída, por lo que hay que tener especial cuidado con las personas mayores, para las que una caída puede suponer una disminución importante de su calidad de vida.

Qué hacer ante una bajada de tensión

Si te empiezas a sentir mareada y crees que estás sufriendo una bajada de tensión, lo mejor es que te tumbes con las piernas levantadas. En caso de que no puedas hacer esto por estar en un sitio público, en tu trabajo, etc., puedes sentarte inclinando la cabeza hacia abajo. También te ayudará a recuperarte si bebes líquidos azucarados o cafeína, así como los caramelos o las gominolas que tienen mucho azúcar.

Para las personas que sufren bajadas de tensión frecuentemente hay una serie de recomendaciones para prevenir estos episodios, como las duchas de contraste alternando el agua fría y caliente, realizar ejercicio físico habitualmente, evitar el sobrepeso, practicar técnicas de relajación, llevar una alimentación equilibrada, no permanecer mucho tiempo en un ambiente muy caluroso y, sobre todo, ingerir abundante líquido.

Hay que tener en cuenta, que una bajada de tensión, aunque no suele presentar complicaciones, a veces aparece asociada a alguna enfermedad. Por eso es muy importante acudir al médico si la bajada de tensión va acompañada de dolor en el tórax, arritmia, fiebre o dificultad para respirar, para encontrar la causa que está originando la hipotensión.

 
 
 

Puedes leer más artículos similares a Bajada de tensión; cómo actuar, en la categoría de Calidad de vida en Diario Femenino.

Publicado:
Actualizado: