Practica la generosidad para mejorar la autoestima

Laura Sánchez, Filóloga

Alrededor de la autoestima giran una gran variedad de aspectos, todos ellos importantes para nuestra estabilidad emocional. Los problemas de autoestima surgen por una pobre valoración de una misma. Nos sentimos poco capaces, poco competentes o poco valiosas. Aumentar nuestro propio valor depende de una de las virtudes de la autoestima: la generosidad.

Generosidad con los demás para la autoestima

Si aún no te has decantado por la vida ascética en una cueva, lo más probable es que vivas en esta sociedad siendo muy consciente de los problemas que te rodean. Hay mucha gente que lo está pasando mal, que necesita ayuda y no siempre la obtiene, porque la cooperación es un concepto que pasa por su peor momento. Lo mismo que la generosidad.

Practicar la generosidad presenta una doble vertiente de altruismo y de egoísmo. Al ayudar a otras personas, también te ayudas a ti misma, porque inmediatamente la visión que tienes de ti aumenta su valor. Ahora te sientes importante para alguien, para esas personas que reciben tu ayuda. Ahora sabes que eres capaz de hacer cosas positivas y, por lo tanto te valoras más.

Lo que mucha gente se plantea es ¿cómo voy a ayudar a los demás si yo también estoy pasando dificultades?. Hay muchas formas de ser generosa y no todas implican la caridad. Una persona generosa comparte lo que tiene, que puede ser su tiempo o sus habilidades, pero no necesariamente dinero.

Generosidad contigo misma para la autoestima

Si la generosidad hacia otras personas te hace sentir bien, hay otro tipo de generosidad aún más beneficioso para la autoestima. La generosidad contigo misma. Para practicar este tipo de generosidad debes eliminar primero el sentimiento de culpabilidad y caminar por la vida pensando que te mereces lo mejor. Nadie mejor que tú misma para proporcionártelo.

Ser generosa contigo misma es mimarte, cuidarte, darte algún capricho o buscar tiempo para hacer aquello que te gusta. Pero la verdadera generosidad con una misma consiste en permitirte ser feliz. Independientemente de lo que ocurra a tu alrededor y, con una pizca de egoísmo, tienes derecho a buscar la felicidad.

Cuando seas consciente de que te mereces ser feliz, cuando tu autocrítica sea más benevolente, cuando te valores en su justa medida y cuando te aceptes como una persona especial, será entonces cuando descubras el poder de la generosidad para la autoestima.

Puedes leer más artículos similares a Practica la generosidad para mejorar la autoestima, en la categoría de Autoestima en Diario Femenino.

Publicado:
Actualizado: