Tengo diabetes, ¿puedo hacerme un tatuaje?

Puedes tatuarte siempre y cuando mantengas a raya tu enfermedad

Tamara Sánchez, Periodista
En este artículo
  1. ¿Me puedo tatuar si tengo diabetes?
  2. Tatuajes y diabetes: Consejos para evitar complicaciones

Tengo diabetes, ¿puedo hacerme un tatuaje?

En la vida hay que tomar muchas decisiones: casarse o no casarse, tener hijos o no tenerlos, estudiar una carrera universitaria u optar por hacer un grado superior… Algunas de ellas serán más importantes que otras, pero, sin ninguna duda, una de las cosas que hay que plantearse muy bien antes de lanzarse a hacerla es la idea de hacerse un tatuaje.

Aunque es cierto que hoy en día existen técnicas para eliminarlos en caso de que en un futuro te arrepientas de habértelo hecho, lo mejor es pensárselo dos veces antes de dar el paso. De hecho, hay determinados casos en los que los tatuajes no están del todo recomendados. Nos estamos refiriendo a esas personas que tienen varices, pecas, estrías, quemaduras o algún otro tipo de cicatriz. Si tienes alguna de estas imperfecciones en tu piel será mejor que descartes la opción de inyectar tinta en ellas.

Pero, ¿qué pasa con las personas diabéticas? ¿Pueden hacerse un tatuaje? En Diario Femenino hemos investigado y esto es lo que dicen los endocrinólogos al respecto. ¡Muy atenta!

¿Me puedo tatuar si tengo diabetes?

Diabetes y tatuajes son dos palabras que cuando aparecen juntas generan mucha división entre los endocrinólogos. Mientras que unos desaconsejan rotundamente tatuarse en el caso de padecer diabetes, otros opinan que, si el paciente tiene la enfermedad controlada, no tiene por qué presentar ningún tipo de complicación o problema.

1 El paciente lleva un mal control de la diabetes

En este caso se desaconseja totalmente la realización de un tatuaje debido a los siguientes factores:

+ Poca capacidad de cicatrización: Las personas que padecen diabetes presentan una menor capacidad de recuperación a nivel celular. Esto hace que exista una mayor probabilidad de formación de úlceras ante una mala cicatrización de la herida presente en la piel después de realizarse un tatuaje.

+ Menor sensibilidad nerviosa: La técnica del tatuaje consiste en implantar microgránulos de pigmentos a nivel de la dermis mediante la utilización de unas aguas muy finas conectadas a un dermógrafo que lleva a cabo un movimiento de percusión sobre la piel. En el caso de una reacción alérgica a estos pigmentos, las personas diabéticas que llevan un mal control de su enfermedad pueden necesitar más tiempo para darse cuenta de los signos y síntomas que avisan de esta posible reacción adversa.

+ Menor respuesta inmunológica ante infecciones: Las personas diabéticas que optan por hacerse un tatuaje deben tener en cuenta que en su caso la piel no protege al 100% del ataque de posibles microorganismos y es muy posible que aparezcan diferentes tipos de infecciones causadas por herpes zoster, verrugas virales, impétigo, etc.

2 El paciente lleva un buen control de la diabetes

Por contra, los pacientes de diabetes que llevan un correcto control de su enfermedad, pueden hacerse un tatuaje siempre y cuando tengan cautela y sigan a la perfección una serie de estrictas medidas:

+ Escoge con precaución la zona en la que vas a realizarte el tatuaje. No es recomendable hacérselo en aquellas áreas donde normalmente te inyectas la insulina, es decir, el antebrazo, el abdomen o los muslos. La herida que se origina en la piel cuando se hace un tatuaje en esos lugares puede terminar derivando en infecciones y, en casos muy extremos, se puede incluso correr el riesgo de amputación.

+ Las personas diabéticas también deben evitar hacerse un tatuaje en aquellos sitios del cuerpo con una mala circulación como por ejemplo los tobillos, las muñecas, la parte baja de las piernas o las nalgas.

+ Escoge un buen tatuador. Es fundamental que la persona que vaya a tatuar a un paciente diabético esté vacunada frente a enfermedades de transmisión sanguínea. Además, la realización del tatuaje debe llevarse a cabo mediante una práctica totalmente aséptica: utilización de material esterilizado, empleo de guantes, ropa adecuada, utilización de tintas que se encuentren en envases unidosis…) Es muy importante también que el tatuador tenga la certificación correspondiente para llevar a cabo la técnica.

Tatuajes y diabetes: Consejos para evitar complicaciones

Si eres una persona diabética y te has hecho recientemente un tatuaje, debes tener en cuenta una serie de consejos para prevenir problemas o posibles complicaciones. Toma nota:

+ Tapa tu tatuaje durante las primeras cuatro horas. De esta forma, lo aislarás del polvo, de la luz y de posibles microorganismos infecciosos. Una vez que pase este tiempo, debes dejar la herida al aire libre para prevenir infecciones por microorganismos anaerobios (son los que no emplean oxígeno (O2) en su metabolismo).

+ A lo largo del primer mes, debes limpiar muy bien la zona con agua tibia y jabón como mínimo dos o tres veces al día.

+ Aplícate una buena crema hidratante sobre la herida. Esto favorecerá el proceso de cicatrización.

+ Trata de no rascarte la herida que ha generado el tatuaje y deja que las costras que se han ido formando vayan cayéndose por sí solas.

+ Presta mucha atención a la mínima señal de alergia como por ejemplo sarpullidos, enrojecimiento, escozor, fiebre, líquido drenado de la herida. En caso de reacción adversa, acude inmediatamente a urgencias.

En cualquier caso, si padeces diabetes y dudas si hacerte un tatuaje o no, lo mejor es que antes consultes con tu endocrino. Nadie mejor que él conocerá tu caso específico y podrá darte las indicaciones oportunas. 

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