7 excelentes formas de conservar setas (y cómo limpiarlas correctamente)

Nadie se resiste a unas tiernas setas de temporada, sobre todo si has salido a recogerlas con tus propias manos, ¿verdad? Y es que las setas frescas son deliciosas, pero lamentablemente no podemos disfrutar de ellas todo el año. Espera, rebobinemos, ¡sí podemos comer setas de temporada todo el año! ¿Cómo? Conservándolas apropiadamente.

Sí, la conserva es la solución. Para esas veces que has salido al campo y has recogido un montón de setas o para aprovechar al máximo la caja enorme de hongos que tus adorables vecinos te han regalado. Tirar las setas es un verdadero pecado y eso en Diario Femenino no lo podemos permitir.  

Por eso, nos hemos propuesto aprender todas las formas de conservar setas y, ya de paso, enseñártelas para que la próxima vez que tengas setas de temporada sepas cómo sacarles todo el partido. ¡Apunta!

¿Cómo conservar setas? Los mejores trucos 

1 En escabeche

Es la famosa conserva de la abuela y funciona muy bien para conservar a corto plazo, por ejemplo un mes o mes y medio las setas en la nevera. Además, adquieren un sabor de otro mundo. ¡Delicioso!  

El ingrediente estrella para cualquier conserva en escabeche es el vinagre. Te compartimos una receta para hacerlo con setas, pero puedes hacerlo también con cualquier verdura que te apetezca conservar (zanahoria, palmito, chile jalapeño, tomate...).

Por cada kilo de setas necesitarás 1/2 taza de vinagre (el de tu preferencia, aunque cuanto mayor sea la calidad del vinagre, más delicioso quedará), 1/2 taza de aceite de oliva y una taza de agua o caldo vegetal. Ponlo a fuego con un poco de pimienta en grano al gusto y una hoja de laurel. Deja que cueza unos 10 minutos, hasta que el aroma del vinagre no se sienta, entonces añade las setas bien limpias y cortadas en trozos. Deja cocer durante 8 minutos más y ya tienes el escabeche preparado.

Lo ideal es que lo conserves en tarros de cristal, de los que tienen cierre hermético, previamente desinfectados y esterilizados. Este delicioso escabeche te durará un mes o más en la nevera.

Puedes hacer escabeche de cualquier seta, aunque con los níscalos y los champiñones queda delicioso. Solo no se recomienda hacerlo con las trompetas de muertos, ya que tienen un sabor más dulce.

2 Cómo conservar setas deshidratadas

Si tienes en casa un deshidratador, esta es una manera maravillosa de asegurarte tener setas todo el año. Si no cuentas con este gadget de cocina cada vez más usado, no te preocupes, en realidad deshidratar setas es muy sencillo. 

Córtalas en láminas finas, ponlas en la bandeja del horno, previamente empapelada con papel aluminio o papel encerado y hornéalas durante 12 horas a tan solo 50 grados. El calor gradual irá deshidratando las setas poco a poco.

De esta manera, puedes conservar setas por más de uno o dos años si las guardas en un tarro esterilizado y hermético, tras lo cual deberás eliminar el aire de su interior hirviéndolos durante 10 minutos.  

Cuando las vayas a comer, puedes probarlas deshidratadas (están deliciosas) o rehidratarlas con agua. Incluso puedes echarlas directamente en el sofrito y con el aceite y un poquito de agua si es necesario se te hidratarán solas.

La mayoría de hongos pueden deshidratarse, excepto los níscalos. Las setas más pequeñas se recomienda deshidratarlas completas, sin cortar.

3 En aceite

Si alguna vez has probado el queso en aceite te harás una idea de cómo se puede hacer una conserva de aceite con setas. Cuanto más carnosa sea la seta, mejor se conservará con esta técnica, por eso el níscalo o el boletus son hongos perfectos para ello.

Para hacer esta conserva solo tienes que limpiar y cortar los hongos en trozos generosos, más o menos grandes. Sofríelos con ajo laminado durante un minuto aproximadamente, sin que el ajo llegue a dorarse en exceso para que no amargue.

Rellena tarros de conserva con esta mezcla. Recuerda que deben estar previamente esterilizados. Y termina de completar con aceite de oliva (o el de tu preferencia) hasta el tope. Cierra los tarros y hiérvelos en agua durante 20 minutos para hacer vacío. Puedes poner trapos entre los tarros para que no se rompan. Esta conserva dura aproximadamente un año a temperatura ambiente.

Puedes añadir otros ingredientes a la conserva, según tus preferencias. Por ejemplo, guindillas o algún tipo de chile en el sofrito, pimienta en grano, laurel.... Usa tu imaginación culinaria.

4 Al vacío

Si cuentas con una máquina de vacío (o tienes un vecino, tío o primo generoso que te la preste) puedes conservar las setas muy bien con esta técnica. Córtalas en láminas después de haberlas limpiado bien, úntalas con aceite de girasol (no aporta sabor, se utiliza solo para su conservación) y una vez que las envases al vacío puedes congelarlas. Tendrás setas para varios meses.

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5 ¿Se pueden congelar las setas? 

Otra manera de congelar setas si no cuentas con máquina de envasado al vacío es esta. Limpia bien las setas y córtalas en láminas frías. Mételas en un recipiente esterilizado apto para congelación (por ejemplo, un tupper de tapa hermética). Echa un chorrito de aceite de girasol. Tapa y remueve bien para que todas las setas se impregnen del aceite. Este proceso no aporta sabor a los hongos, solo ayuda a una mejor conserva. Se suele considerar 125 centilitros de aceite de girasol por cada 1/2 kilo de hongos. Congela las setas.

Cuando vayas a comerlas, debes esperar a que se descongelen y es importante aprovechar al cocinar el jugo que haya quedado del proceso, ya que ayuda a que las setas se se hidraten nuevamente al cocinar.

6 Cocinadas

Orta manera ideal de preservar hongos es guardarlos en el congelador cocinados. Por ejemplo, puedes sofreírlos durante 5 a 7 minutos en una sartén con un chorrito de aceite. Una vez que estén sellados, guárdalos en un tupper de congelación y te durarán congelados hasta 9 meses.  

Cuando los vayas a consumir, espera que descongelen. Puedes usarlos tal cual en sopas o sofreírlos con verduras y una cucharada de salsa de soja. ¡Deliciosos!  

7 Setas blanqueadas y congeladas

También puedes blanquear los hongos y guardarlos en el congelador para tener setas como si fueran frescas durante un año. Para ello, limpia bien los hongos y córtalos en láminas. Introdúcelos en una olla con agua hirviendo durante tan solo 2 minutos (este es el proceso de blanqueo). Sácalos con un colador y seguidamente introdúcelos en un bol con agua helada (agua con cubitos de hielo), con la intención de cortar el proceso de cocción. Cuando los hongos se hayan enfriado retíralos del agua y congela en un bote de congelación.

Los hongos ideales para este proceso de conservación son los que tienen una carne más dura, como los champiñones.  

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Técnicas para limpiar setas correctamente

Una de las cosas más importantes a la hora de conservar setas y hongos es limpiarlas adecuadamente. En general, no se deben limpiar con agua, sino con unos cepillos especiales para limpiar hongos con los que se elimina cuidadosamente toda la tierra de las setas.

Sin embargo, puede que prefieras lavarlas con agua, ya sea porque tienen demasiada tierra o porque te parezca mejor. Si decides mojar las setas para hacer un escabeche no hay problema, pero para el resto de las conservas tendrás que secarlas previamente antes de conservarlas. Debes asegurarte de que realmente hayan secado bien, ya que si no la técnica de conserva no será totalmente fiable.

¿Te han sido de utilidad estos trucos para conservar setas? ¿Conoces alguno otro? ¡Déjanos tus comentarios! ¡Te leemos!

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