TOC de comprobación o duda patológica: en qué consiste

Cuando la ansiedad te hace dudar de todo y no tienes seguridad en tus actos

Laura Sánchez, Filóloga
Revisado por Laura Palomares, Psicóloga
En este artículo
  1. Qué es el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)
  2. La necesidad de comprobación
  3. La duda patológica: en qué consiste

Los trastornos emocionales pueden llegar a complicar hasta un extremo radical la vida de las personas que los sufren. Uno de los más peligrosos y evidentes es el Trastorno Obsesivo Compulsivo, que llena tu vida de dudas y de necesidad de comprobar todo infinitas veces. ¿Te suena eso de comprobar una y otra vez si has cerrado la puerta? Seguro que lo has hecho alguna vez que has estado nerviosa, pues imagínate si ese comportamiento dominase tu vida. por ello, en Diario Femenino te contamos en qué consiste el TOC de comprobación o duda patológica.

Qué es el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)

Cuando hablamos de TOC hablamos de una de las peores manifestaciones de la ansiedad. Es un trastorno peligroso que provoca muchas limitaciones en la vida de la persona que lo sufre y va más allá de las manías. No se trata de ser una persona limpia, preocupada u ordenada, sino de una obsesión con muchos riesgos.

Este trastorno es obsesivo por el carácter de sus pensamientos. Si no me lavo las manos, tendré gérmenes y pueden provocarme un problema de salud; si no ordeno la ropa de una determinada manera, mi universo se desmoronará; si no cumplo con los rituales establecidos, algo malo ocurrirá.

A estos pensamientos obsesivos y recurrentes se le suman las compulsiones, es decir, las acciones que generan esos pensamientos. Las compulsiones son actos repetitivos que se realizan de forma casi automática y que están dotados de una sensación de imperiosa necesidad. En cualquier momento y en cualquier lugar, a costa de lo que sea. De hecho, estos actos se realizan con el fin de neutralizar o rebajar la ansiedad que provocan los pensamientos obsesivos.

¿Y dónde encaja la necesidad de comprobación o la duda patológica en los Trastornos Obsesivos Compulsivos?

La necesidad de comprobación

La necesidad de comprobación o de verificación es algo que nos ha pasado a todos, pero no siempre es una patología. Cuando estás más nerviosa de lo habitual, vuelves a comprobar si has cerrado la puerta, si has apagado las luces, si has cerrado la llave del gas, si has enviado ese mail al destinatario correcto, si has mirado bien la hora del reloj... ¿No lo has hecho alguna vez?

Pero eso no es un TOC. Estos gestos se convierten en un problema cuando se hacen de forma repetitiva y durante un largo periodo de tiempo. Porque lo hagas un día, no te va a pasar nada. Pero si persiste el problema de ansiedad, la compulsión de comprobar o verificar si algo está correcto o no, en su sitio, cerrado, apagado o lo que corresponda, acaba por invadir toda tu vida. En definitiva, la paradoja es que a medida que tratas de controlar más las comprobaciones, mayor es sensación de pérdida de control.

Y todos tus pensamientos. La obsesión hace su aparición fruto de una ansiedad que no se ha sabido cómo gestionar. Una vez que entras en el laberinto de pensamientos obsesivos, ¿cómo se encuentra la salida? Sin duda, hay que pedir ayuda psicológica y someterse a una terapia cognitivo conductual.

La duda patológica: en qué consiste

Pasemos a la duda patológica, que es a la vez causa y consecuencia de este TOC de comprobación. ¿He cerrado la puerta? ¿He apagado la luz? ¿Llegaré a tiempo al trabajo? ¿Habré enviado ese correo? Son las dudas, las inseguridades que pasan de manía a patología cuando envuelven toda tu vida. ¿Te imaginas vivir en una duda constante?

No se trata de dudas existenciales o de encontrarle sentido a la vida. Se trata de dudas cotidianas que precisamente convierten tus días en un infierno de inseguridad. Hay que comprobarlo otra vez, porque no estás segura de si has cerrado bien la puerta. Lo peor es que la duda no desaparece una vez que realizas el acto compulsivo de comprobarlo una vez más. E incluso, suele aumentar junto con la ansiedad tras la comprobación y acentuar sus síntomas.

La duda te lleva a la compulsión, pero no desaparece con ella. Es la trampa o el círculo vicioso del TOC. Como en una adicción cualquiera, pasado un tiempo, tus pensamientos vuelven a esa duda patológica y a esa necesidad de comprobación. ¿Y cómo se frena todo esto? Insistimos en la necesidad de buscar ayuda psicológica, porque se trata de un trastorno importante que puede necesitar también medicación.

¿Y tú? ¿Padeces o crees que podrías padecer el TOC de comprobación o duda patológica? No olvides que ante todo lo más importante es buscar ayuda profesional. ¡El TOC se puede superar!

Puedes leer más artículos similares a TOC de comprobación o duda patológica: en qué consiste, en la categoría de Ansiedad en Diario Femenino.

Publicado:
Actualizado: