La importancia del autoconocimiento para saber lo que te hace feliz

Consejos para conocerte mejor y saber cómo realizarte en la vida

Laura Ruiz Mitjana, Psicóloga
En este artículo
  1. Autoconocimiento: ¿qué es?
  2. ¿En qué nos beneficia el autoconocimiento?
  3. 5 estrategias para mejorar tu autoconocimiento

¿Quién soy yo realmente? ¿Alguna vez te has hecho esta pregunta? Es una pregunta que ya nuestros antepasados lejanos se hacían y que forma parte de las grandes cuestiones de la filosofía, eso es, las grandes preguntas del ser humano.

Con todo ello tiene que ver el autoconocimiento, un tipo de conocimiento que responde a la cuestión de quiénes somos, qué nos gusta y qué no, qué nos hace felices, qué nos define… Cuando somos capaces de conectar con nuestros valores, creencias, recuerdos y pensamientos más profundos, somos capaces de acercarnos un poco más a este conocimiento.

Pero, ¿qué más sabemos del autoconocimiento? ¿Cuál es su verdadera importancia? ¿En qué nos puede ayudar? ¿Cómo potenciarlo?

Autoconocimiento: ¿qué es?

El concepto de autoconocimiento hace referencia al “conocimiento de uno mismo”; a este conocimiento se llega tras reconocerse como persona individual, con sus defectos y cualidades particulares.

El autoconocimiento es un proceso, un viaje que, en realidad, dura toda la vida. Tenemos muchas formas de conocernos mejor a nosotras mismas: a través de las propias experiencias de la vida, de la relación que tenemos con nosotras mismas (y de cómo nos tratamos), de nuestras relaciones interpersonales, de nuestros hobbies y viajes, nuestras parejas, nuestros defectos y fortalezas, a través de la terapia psicológica… 

También podemos conocernos mejor viajando, leyendo, escribiendo, dedicándonos tiempo, atendiendo nuestras emociones y nuestras vivencias, escuchándonos… y, en definitiva, construyendo nuestro propio yo

No hemos de olvidar que autoconocerse implica acercarse progresivamente a ese “Yo”; pero ese “Yo” no es estático, sino que va cambiando con el tiempo y las experiencias. Es decir, es un “Yo” que se construye.

¿En qué nos beneficia el autoconocimiento?

Desde la psicología se entiende el autoconocimiento como un factor clave para conseguir un mejor desarrollo personal. Conocernos mejor nos ayuda a conectar con nuestra verdadera esencia, conocer qué nos gusta y qué no, identificar qué límites debemos marcar en nuestra vida y con los demás para sentirnos bien, escoger metas realistas y, en definitiva, saber en qué lugar de nuestra trayectoria vital nos encontramos.

Además, el autoconocimiento también nos ayuda a conocer qué acciones debemos realizar para acercarnos a nuestros objetivos o a aquello que deseamos.

5 estrategias para mejorar tu autoconocimiento

Existen múltiples formas de potenciar tu autoconocimiento, como las mencionadas al inicio del artículo. En Diario Femenino hemos seleccionado 5 de ellas para que empieces a conocerte un poquito mejor. ¡Te animamos a poner en práctica estos ejercicios!

1 Conoce tu historia de vida

Nuestra identidad se va desarrollando a medida que vamos viviendo y experimentando. Todas las experiencias, tanto positivas como negativas, tienen un impacto en nuestra psique y en nuestra forma de funcionar. Por ello, conocer tu historia de vida puede ayudarte a mejorar tu autoconocimiento.

Un pequeño ejercicio que puedes hacer, y que se utiliza mucho en terapia, es la curva de la vida; consiste en hacer un eje cronológico con los eventos más importantes de tu vida. Anota cuáles han sido, qué emociones despertaron en ti, por qué supusieron un antes y un después… Anota las experiencias positivas y negativas y reflexiona sobre todo lo que te ha conducido hasta quién eres hoy.

2 Potencia tu vocabulario emocional

El segundo ejercicio que te proponemos para trabajar el autoconocimiento es uno que te permitirá aumentar tu vocabulario emocional. Para conocernos, es importante que aprendamos a poner nombre a lo que sentimos, y eso implica “etiquetar” nuestros estados emocionales. Por ejemplo, ser capaces de identificar la tristeza, la rabia, la decepción…

¿Cómo realizar este ejercicio de vocabulario emocional? Primero de todo, destina dos minutos para hacerlo, idealmente en un lugar tranquilo. Escribe en una hoja de papel (o en tus notas del móvil) todas las emociones que conozcas y se te ocurran. Hazlo con tranquilidad. Después de esos dos minutos, cuenta las palabras que conseguiste anotar.

La realidad es que existen ¡más de 100 emociones! Lógicamente, no todas ellas son emociones básicas. De hecho, generalmente se habla de 6 emociones básicas: la felicidad, la tristeza, el asco, el miedo, la ira y la sorpresa. Pero de la combinación de las mismas, o bajo la capa de estas, encontramos un sinfín de conceptos que hacen referencia a diferentes matices de las emociones. En la siguiente rueda de las emociones podrás comprobarlo:

3 Haz un diario de emociones

Otra estrategia útil para mejorar nuestro autoconocimiento es llevando a cabo un diario de emociones. En un diario podemos expresar todo aquello que sentimos, sin vergüenzas o tabúes, sin filtros. Podemos escribir lo que nos ocurre y qué nos hacen sentir esos eventos del día a día. 

Con esta pequeña práctica diaria (no es necesario que escribas cada día), puedes conocerte mejor, sobre todo cuando te releas; además, te ayudará a identificar patrones emocionales y conductuales y a distinguir cómo se expresa cada emoción en ti, a nivel físico y mental.

4 Conecta con tu cuerpo

Autoconocernos implica conocernos por dentro pero también por fuera y eso se consigue a través de una conexión entre cuerpo y mente. Por ello, otra forma de autoconocerte puede ser reconectando con tu cuerpo, ya sea a través del baile, del yoga, del deporte… Experimenta con él; tócalo, míralo, ámalo… y agradece que funcione bien, que te acompañe y te sostenga.

“Conectar con nuestros cuerpos es aprender a confiar en nosotros mismos y eso tiene un poder.” 
-Mirka Knaster-

Es importante conectar con el cuerpo porque también forma parte de nuestra expresión emocional. Cuando experimentamos una emoción, experimentamos también una sensación física. Aprender a identificar esas emociones y esas sensaciones se consigue conectando con el cuerpo. Si reconocemos esas sensaciones físicas, podemos identificar qué emoción estamos sintiendo. Todos ellos son pequeños pasos hacia el autoconocimiento.

5 Invierte tiempo en ti

No hay nada más enriquecedor que pasar tiempo con nosotras mismas. A veces nos cuesta y ponemos mil excusas para posponer esos momentos: la rutina frenética que nos atrapa, el miedo a la soledad, el miedo a darle demasiadas vueltas a las cosas si nos quedamos solas… Y ahí, en esa soledad, salen todas nuestras carencias y nuestros miedos, pero también la oportunidad de conocernos mejor

Cuando no hay distractores del ambiente, podemos ser capaces de conectar con lo que realmente necesitamos en ese momento. Y lo que necesitamos también tiene que ver con quiénes somos. Así que, si quieres seguir conociéndote, busca ratos para ti: planea una escapada tú sola, un retiro espiritual… lo que más te apetezca, el plan da igual. No importa tanto lo que hagas sino que dediques ese tiempo a pasarlo contigo misma.

“Durante la soledad, hazte buen amigo de ti mismo”.
-Anónimo-

Y tú, ¿crees que te conoces a ti misma? Hemos visto algunas formas de potenciar el autoconocimiento, aunque lo ideal es que cada una de nosotras encuentre su propia manera.

Recuerda que conocerse no implica que nos guste todo de nosotras mismas (ni siquiera implica la aceptación, aunque nos acerca a ella); conocerse implica vernos en nuestra totalidad, como personas que han vivido, que han amado y que han sufrido y que, a día de hoy, están llenas de virtudes y defectos, producto de sus vivencias que se acaban convirtiendo en recuerdos y cicatrices.

Autoconocerse es bueno en tanto que nos permite identificar más fácilmente qué queremos en nuestra vida (y qué no) y seleccionar aquellas cosas que realmente nos hacen felices. Porque, si no te conoces, ¿cómo vas a saber lo que te gusta? ¿Cómo vas a ser capaz de establecer límites o de apartar a gente tóxica de tu vida? El viaje del autoconocimiento es largo (y muchas veces, complejo), pero merece la pena recorrerlo. 


Referencias bibliográficas:

  • Branden, N. (2001). La Psicología de la Autoestima. México: Paidós.
  • Payá, M. (1992). El autoconocimiento como condición para construir una personalidad moral y autónoma. CL&E, 15: 69-76.

Puedes leer más artículos similares a La importancia del autoconocimiento para saber lo que te hace feliz, en la categoría de Autoayuda en Diario Femenino.

Publicado:
Actualizado: